Antigua Roma > República romana > Patricios y Plebeyos

Ya restablecida la República Romana de una manera definitiva, adquirieron los romanos las siglas SPOR, “Senatus populus-Que Romanus” o sea “Senado y el pueblo romano”.
En aquellos momentos, la clase dominante eran la de los patricios, cuyos miembros ocupaban la mayor parte de los cargos senatoriales, considerándose superiores a los plebeyos, que no tenían participación alguna en el gobierno de Roma, por no ser ciudadanos romanos, ya que venían del exterior de la ciudad, dedicándose a labores agrarias, empleos industriales, pero sin la igualdad que los primeros reyes pretendieron.
Aun así existía una clase intermedia entre los patricios y plebeyos, los “clientes”, no pertenecían a la clase plebeya, pero si provenían de ella, donde los patricios establecían un vínculo de derechos y obligaciones por ambas partes, losplebeyos tenían derecho a recibir asesoramiento jurídico y apoyo de los patricios que se convertían en sus patronos, y estos clientes debían colaborar con sus patronos, incluso económicamente.
Se daba el caso en la sociedad romana, que la clase de los plebeyos, era mas numerosa que la de los patricios, y estos necesitaban en muchas ocasiones el apoyo de los plebeyos, con el fin de poder alcanzar los patricios privilegios y prebendas en sus carreras políticas o económicas, con lo cual se veían en la obligación de hacer partícipes a los plebeyos de las parcelas conquistadas por los patronos, aunque no fuera de una manera total.
A causa de las guerras de fronteras con los enemigos de Roma que se acercaban por el norte, los plebeyos eran lo primeros en sufrir las consecuencias, al perder sus tierras por tales conquistas, o bien quedar sus cultivos en terreno enemigo recién conquistado, en consecuencia se endeudaban considerablemente, ya que los patricios exigían a los plebeyos el pago de los impuestos, de lo contrario los condenaban a penas de cárcel, incluso los ejecutaban si ese era el deseo del patrono.
Aunque los plebeyos estaban representados en el Senado por los “comicios centuriados” estas instituciones eran poco respetadas por los patricios, por lo que los plebeyos decidieron exiliarse hacia el Aventino, al “Monte Sacro” a unos cinco kilómetros de Roma, amenazando con fundar una nueva ciudad que seria sus sede, negándose a proporcionar, mano de obra tanto en el campo como en las ciudades, así como no participar en el ejército, con la aportación desoldados plebeyos.
Roma acudió al patricio Menenio Agripa con objeto de parlamentar con los plebeyos, contándole Agripa la historia de que en un clan el padre no procuró comida a su familia, muriendo él mismo de hambre y todo el resto del clan, pero los plebeyos no consintieron ceder, a menos que Roma les anulasen todas sus deudas, Roma cedió a estas pretensiones, regresando los plebeyos a la ciudad.