Roma Imperial > Los Antoninos > II Trajano

Marco Ulpio Trajano, nacido en Santiponce, junto a la actual Sevilla, el 18 de septiembre del año 53 d.C.
La principal característica de Trajano, fue el auge que le dio a toda clase de construcciones, en todo el Imperio Romano, a saber: el foro Trajano, el mercado Trajano, la muy famosa columna Trajana. Es de destacar en la ciudad de Ancona (Italia) el arco de Trajano, nivelaciones al pié de las colinas del Quirinal y Campodoglio. Dejó una de sus más conocidas obras en España, representada por el Puente de Alcántara.
Trajano era considerado buen militar y sobre todo un eficiente administrador, descendiente de una familia aristocrática provincial, su trato era justo y muy disciplinado en todas sus acciones.
La ascensión de Trajano a emperador, supuso una considerable expansión del Imperio Romano, reforzando las fronteras del norte contra las continuas invasiones bárbaras de los Catos en la línea del Rin, Marcomanos que amenazaban Retia (actuales Chekia, Polonia, Hungría), los Cuados peligrosos para con Panonia (Austria y Balcanes). O bien defendiendo la provincia de Dacia por las incursiones de los Sármatas. Trajano también tuvo en cuenta los ataques recibidos por el Asia Menor, debidos a los Partos.
Cuando Trajano fue proclamado emperador, estaba con su ejército en Germania, pero ello no supuso ninguna alteración en su carácter, sino que acabó de solucionar sus asuntos germanos, tomando después el poder, con muy buena relación con el Senado. Trajano era clemente con los vencidos, como ocurrió en la rebelión de Dacia por su rey Decébalo, Trajano invadió este país, pero respetó la vida de Decébalo, incluso lo mantuvo en su trono, exigiéndole pagar tributo a Roma, aun así Decébalo se volvió a levantar en armas, por lo que Trajano de apoderó de las minas de oro transilvanas, empleándolas en la financiación de obras urbanas, y juegos circenses durante cuatro meses, con la participación de mas de diez mil gladiadores.
Trajano se preocupó de sus habitantes, proporcionando construcciones para su bien estar, o bien distribuyendo trigo gratuitamente, igualmente extendió el derecho de ciudadanía a gran parte del Imperio Romano, condonando a muchos ciudadanos sus deudas con el estado. Para mejor abastecimiento de Roma, Trajano hizo ampliar el puerto de Ostia, un gran puente sobre el Danubio, y el trazado de cuatro magníficas carreteras, entre otras muchas edificaciones.
Se debe a Trajano, la política natalista, para una mayor demografía que favorecería tanto a la agricultura, como al aumento de personal para servir en el ejército, punto importante de la expansión territorial que Roma necesitaba constantemente.
Se debe a Trajano, la incorporación al Imperio Romano, de bastos territorios, como Armenia, Alta Mesopotamia, llegando hasta el Golfo Pérsico.
Como muestra del potencial humanístico del Emperador Trajano, se cuenta la siguiente anécdota por la costumbre de recibir personalmente a cualquier ciudadano, en solicitar este la resolución de un problema, o reclamar justicia, sin necesidad previa en pedirle audiencia, quejándose el secretario de Trajano, el que su señor, confiase tan fácilmente de todo aquel que se le acercara, a la cual insinuación le contestó Trajano, “Trato a todos como quisiera que el Emperador me tratase a mi, si fuera un ciudadano particular” tal era la grandeza de su espíritu.
Trajano al borde de los 60 años (edad muy avanzada para aquella época), enfermó de hidropesía, quiso viajar a Roma para morir allí, pero una fulminante parálisis en el año 117 se lo impidió. Las cenizas de Trajano, fueron llevadas a Roma enterrándolas a los pies de la Columna Trajana.